Es la frase que habría que decir cada vez que se va a crujir un gamón
para que explote en condiciones pero lamentablemente se está olvidando.
Alguien debería contarle a los niños este importante detalle ,entre otros, para
vitalizar nuestra fiesta por autonomasia, declarada bien de interés cultural.
En eso de inculcar a nuestra descendencia, nuestra tradición, está la clave...
como se hizo desde que existe la memoria ubriqueña.
En esta foto que publicó nuestro padre Manuel Cabello Janeiro en los años setenta,
se ve como una "escuela de campo" - de Rousseau- incipiente, donde los niños de entonces,
ahora hombres y mujeres de provecho, aprendían. Ellos son los que mantienen viva la fiesta.
De todas las maneras y miremos por donde lo miremos,
el tres de mayo debe ser para que disfruten...
ellos que son los que de verdad se ilusionan con ese día.
Previo y durante los días de los Gamones, ha rodado por los foros ubriqueños una pregunta...
"¿Por qué no un lugar dónde, in situ, reservar para los infantes una exclusiva candela, en la que enseñar el cómo y el por qué de la fiesta que cuando mayores descubrirán que es única?"
Los niños se encandilan con el juego...
Les encanta que le cuenten cuentos.
¿Por qué no una zona reservada donde enseñarles jugando a cuentacuentos...
a hacer una cabaña en condiciones, ¡cómo las de antes!
Enseñarles el cómo apilar la leña y no esperriarla como si fuera un muladar.
Mostrar énfasis en la forma de cortar los gamones y no arrancarlos a patadas como estos
pues se destruye el rizoma diversificado, causando la muerte súbita de la planta.
¡Bastante tienen ya los gamonales de nuestros contornos,
con el vapuleo anual al que son sometidos para nuestra celebración!
Necesitamos un lugar con una candela que no desprenda muchas calorías.
Una pequeña candela rodeada sólo de veinte o treinta ladrillos ensamblados con un simple
saco de yeso y arena en su interior para que no dañe el suelo que la ubique.
Una candelita para que sus tiernas manitas puedan introducir el gamón en las ascuas...
¡sin riesgo!
Una candela Infantil donde la cantera pueda catapultar nuestra tradición al futuro.
Una candela infantil vespertina para que los padres y madres puedan disfrutar de ellos...
hasta que acaben explotados todos los haces de gamones recogidos en familia.
Una candela Infantil para que ninguna niña tenga que mirar con nostalgia a los demás
porque la fiesta sea masculina.
Los críos son los impacientes que están presentes cuando se le mete el misto a la candela.
el gamón en ristre.
Más tarde, cuando la candela sea invadida por los "brutos" mayores...
para ellos se acabó la diversión.
Tienen que refugiarse en hombros de sus papás...
o emigrar a otras candelas a ver si encuentran mejor suerte.
¡Vaya!
¡Resulta que eso también está ocurriendo en toda España!
La candela de los mayores se torna prohibitiva e inalcanzable para los menores.
-"¡Ahí no hay quien se arrime!"- Dice uno azorado.
-"!Queremos una candela Infantil!"- Clama otro contrariado.
Junto a esa pintada de la fachada, producto de los "decoradores de exterior",
se encuentra nuestro hermano Leandro, asiduo "feisbusero",
comentándole a nuestro querido profesor y cicerone en la localización
de la fuente de la Matilla, que con un mes de antelación y
con el beneplácito de muchos vecinos -con hijos- había solicitado formalmente a
quién competía, la ubicación de una candela infantil...
y viendo que a algunos bares del pueblo les habían sido concedida la gracia,
albergaba hasta los últimos momentos, Esperanza
(que para ello es hijo, hermano y tío de ella).
-"¿Será ésta nuestra candela, papi?"
-"¡No, hijo!
Hemos pedido que nos la pongan en la plaza del maestro Francisco Fatou, junto a la Iglesia".
-"¡Pero no encima del escudo! ¡Hijo...! Sino al lado, encima de las piedras...
¡Como todas las veintitrés candelas del pueblo que
con las dos de los bares, suman veinticinco!"
-"Si no pudiera ser, un buen lugar sería en el solar donde antaño estaba el bello mercado.
Los vecinos que aparcan allí, no tienen inconveniente en retirar los coches para ello, tal y como lo hacen en la plaza de aparcamientos de la Verdura. Pero aún no me han contestado".
La fresca idea de una candela Infantil es innovadora y francamente necesaria...
Incluso se presentó algún que otro joven colaborador,
entusiasta con el proyecto en el lugar donde seguro
iba a cocerse el futuro de la tradición -los electricistas para más inri,
habían instalado uno de esos cuadros que se usan para los grandes eventos-
pero una persona, "la mujer que manda" -como define Aulen a la jefa de
las tribus prehistóricas en los "Hijos de la Tierra"- que de seguro no es educadora,
echó en saco roto la magnífica propuesta. ¡Gran desilusión!
Leandro y los padres que tanta ilusión habían puesto en el empeño, se tuvieron que
contentar para los niños, con los primeros momentos del encendido de la candela
de la plaza de aparcamientos de la Verdura. ¡Pero no hay problema...!
Con el estilo característico de Ubrique en verde, ya demostrado en entradas
como la de los aldabones- los amarraburros, vamos a cumplir el sueño de una persona
inmiscuida con la cultura de su pueblo al cien por cien, como lo fue su padre...
¡Leandro!
¡Ya tienes tu premonitoria candela Infantil aunque sea rústica-analógica,
en la plaza del maestro Francisco Fatou!
- Ya sabemos que los maestros son los que entienden-
.
Muchas gracias Manolo en realidad lo pedimos más de veinte familias y como dices no solo era la candela, también pensabamos adornar la plaza y poner la cruz. Pero al final solo hemos conseguido que nos engañen y que practicamente se rian de nosotros. Aunque no me extraña viendo que para ellos es más importante que pulule por Ubrique el ejercito franco-bosqueño ( previo pago, porque aqui nadie ataca gratis) solo hay que buscar en el cartel anunciador de la fiesta una Candela que no existe o unos gamones que aparecen en un quinto plano. En fin esperaremos a la patacabra que esta si tendra por cuarto año consecutivo su versión infantil.
ResponderEliminarLa foto analogica para la posteridad.jaja
Hola a todos. Sin ser de ubrique, que no lo soy, aunque como gaditano puedo ser de donde quiera, tengo que decirle dos cositas A LA QUE MANDA:
ResponderEliminarPrimera: Las tradiciones populares tienen su futura permanencia en las nuevas generaciones.
Segunda: Lo que habría que cortar de raiz son las nuevas generaciones de algunos partidos políticos.
Hasta pronto. <<>
www.desobediencia.es
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