sábado, 4 de agosto de 2012

Sierra de Ubrique. Para comérsela. Detalles II


La persona que llega por primera vez a la villa de Ubrique,
 al verla agazapada en su hoyo,
  con las calizas ofreciendole una estampa espectacular, dice para sí... 
-"¡Hum! ¡Para comérsela!"
Sólo basta adentrarse un poco en los detalles de la sierra...



para entender que el comentario es de lo más acertado.




Es una delicia poder comprobar, por ejemplo,
 que el pie de piedra tiene una puerta por la que pasar
y que está...



allá arriba, junto a la cueva de la Vieja por encima de la Era del Ubrique el Alto
a la derecha del viso de los Carboneros en los Pernales...



o poder admirar in situ, el inagotable esfuerzo del agua al disolver la roca
empleando más paciencia que la de todos los humanos juntos.
Observar las imponderables formas de la piedra; mejor dicho...


las multiformes estructuras calcáreas en las que a veces, parece que
intervino la mano del modificador por excelencia... 
el bípedo pensante o malpensante (a elegir).




La sierra tiene rincones acogedores en los que se...



 combinan perfectamente los dos tonos predominantes
 por entre sus excelsas cárcavas calizas.



Tonos que varían dependiendo de si llueve o...



si hace sol; en cualquier estación.
De todas las formas, la sierra de Ubrique es para comérsela.



La formación da igual que sea por fragmentación tectónica o...



disolución de la caliza.



La combinación de ambas dan ese toque atractivo a la montaña que
 siempre nos reserva, en la espera...



una buena sorpresa 
(siempre nos sedujeron los boquetes que son los piloncitos naturales)...



o abrigo, si la inclemencia nos aborda sin previo aviso.



Refugios que a su vez encierran más regalos, 
bien sea por la grafía natural impresa...



como la imposición paciente y grumosa resultante de la propia disolución.



Que ilusión durante toda la vida poder decir:
 ¡Vamos pecho arriba a darnos un paseíto por la sierra!
¡Seguro que pasaremos por los prados donde pacen los dragones de piedra!



¡Seguro que nos sorprenderemos a la vista de estas plantas reminiscentes del Jurásico!



O contemplar la floración de la caduca cornicabra 
que da nombre a nuestro antiguo depósito de agua



En todas las posiciones, la sierra de Ubrique... para comérsela.
Aunque no esté en Antequera...



tiene sus torcales laminados.



Su sistema kárstico no tiene comparación aunque
 por aquí decimos que son cascajos.




Podemos toparnos con una sorpresa tras otra como ésta en la entrada de la sima que hay
 antes de llegar a Vega Redonda en el camino de Ronda,



o esta roca "tarta de merengue" que podemos saborear en la antigua ciudadela de Umrica
en el Ubrique el Alto, donde estaban las colmenas del refrán camino de la Cruz del Tajo.
Ya sabemos que no se puede comer de este merengue calcáreo;
 pero tampoco podemos comernos...



a los animales que vayamos encontrando en el camino y por supuesto, 
muchísimo menos, caer en la horrenda práctica de...



comerse a las beneficiosas e insustituibles avecillas que pueblan nuestros contornos.
Por desgracia aún existe esa subespecie depredadora y mentecata que piensa que es un
placer comer pajaritos. La palabra barbaridad se queda corta a la hora de
 definir tal "averración", ya insostenible. Es tiempo de modificar la conducta retrógrada 
y cruel, arrastrada desde antaño, con eso de las perchas, la liga, la red, la escopetilla plomo.
Afortunadamente, ya no se ven "tiraores".
Que comer hay que comer... ¡De acuerdo! Pero que cuando decimos la...



Sierra de Ubrique, para comérsela...



no es para hacerlo en sentido literal. 
Es más bien para...




saborearla metafóricamente, igual que saboreamos un poema.
Vamos a echarla de menos en estos días de lógico calor
pero seguiremos subiendo y hablando de ella después de las vacaciones.


(Si quieres ver "Sierra de Ubrique, Detalles III", pincha aquí)



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1 comentario:

  1. Muy bonita, siempre me ha encantado la sierra y especialmente esta zona

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