Otra señal

Para celebrar la entrada número ochenta de Ubrique en verde, hemos preferido recordar el

episodio "una señal" en la entrada treinta porque nos dio la impresión que quedó corto.

No hace mucho nos topamos con unas fotos en Internet de entre las que nos llamó la

atención una que su comentario era...

-"¡Lo siento pero se me olvidó echar el ancla!"

En Ubrique no tenemos nada parecido pero sí las hemos buscado

 para hacer la cuenta atrás de nuestras señales de hoy.

Mientras descontamos, echémos imaginación y tratemos de averiguar su ubicación.

 -¡Anda, bueno, os lo diremos!

 Este disco está por encima de la Curva las Pitas.

El anterior, más allá de la primera rotonda nueva de la carretera de Cortes.

 Como de éstas no tenemos en el pueblo, nos dimos un paseíto hasta nuestros

vecinos de Benaocaz que verán partir hoy sábado a los romanos por la calzada abajo.

(Queremos agradecer la colaboración del pajarito del cable que esperó a que tiráramos la foto)

Nos alegra que las dos palmeras hayan al parecer, superado la agresión del picudo
que abate decenas de ejemplares de estos árboles singulares.
¡Una autentica desgracia la enfermedad de las palmeras!

Por lo visto ese bichejo no ataca a todas las palmeras.

-¡Mejor para vosotras las washingtonias...!

-"¡Creemos que es muy difícil superar esa velocidad en toda la población de Benaocaz!"

(Hay otra señal de "a veinte" en el camping de la Torrecilla de El Bosque y

otra a la entrada de la planta de RSU que embellece la falda del Salto de la Mora)

Y el único diez que hemos podido fotografiar es éste. 
Creemos que significa... 
-"¡Tranquilo, sólo es un tramo con un diez por ciento de peligrosidad!"
 ¡No hay problema por la avenida de Jesulín!"

Una vez terminada la cuenta atrás, comienzan las normas extraordinarias 
de la circulación en nuestro pueblo.

-"¡Si no eres de Ubrique no puedes bajar al pueblo 

por la Calzada de las Cumbres en coche!"

Pero si eres residente sí. La indicación es bien clara.

La misma claridad que ésta que dice literalmente:

 -"Imposible aparcar en Ubrique a ambos lados del pueblo"

-"¡No aparcar encima de los contenedores!"

Ésta es buena. 

-"¡Prohibido aparcar en la oficina del paro!"

Que con esto de la crisis dicen que ya hay muchos parados en ella.

Más claro, agua:

-"¡Prohibido aparcar a los autorizados juzgados!"

 Lo tienen prohibido pero todos los que aparcan ahí tienen un papelito

en el salpicadero que dice: ¡autorizado juzgado!

Incoherente, ¿no?

En Ubrique practicamos la costumbre de aparcar donde no se debe y aunque

se indique reiteradamente con creces, algunos...

 pasan olímpicamente y siguen con su práctica...

entonces aparecen las inevitables y desagradables amenazas...

pero perdura el guaseo.

¡Desde luego no tenemos remedio!

Más vale poner un poco de humor en la vida y hacer como ésta;

 jugar aunque sea el esconder...

porque si no, esta vida es un caos, como el que se forma a diario en los 

Callejones, a la altura de donde estaba la antigua gasolinera.

"¡No, si yo no he aparcado! ¡Si es un mandadito! ¡Si no está prohibido parar!"

Como si la indicación central no estuviera bien clara.

Por encima del Jardín hicieron estas rampas y su señal autoriza a circular

por ella a todo el que se arriesgue, menos a Takito, que según parece

es bastante malo al volante.

-"¡Y usted no tiene pintura!"

  Esta señal nos está diciendo claramente cómo está la situación de la 

industria de la piel en nuestro pueblo:

"Un círculo vicioso".

Por muchas vueltas que demos no vemos la salida.

¡Que me lo explique alguien!

-"Parking de motos excepto motos"

¿Y Ciclom, quién es? ¿Un nuevo superhéroe?

Algunas señales sorprenden cuando por fin, las interpretas correctamente.

Por lo visto en la avenida España está prohibido circular, jugar a la pelota
 y pasar montado en bicicleta, excepto la policía que según parece, 
pueden echar un partidito en la peatonal. 
Menos mal que nuestros agentes son prudentes y sensatos profesionales
 que no creemos que tengan ganas de jugar 

como chiquillos en medio de la calle.

Para sorpresa, ésta. 
Cuando salimos del pueblo hacia El Bosque,
 un poco más allá de las Poleeras,
 ya nos avisan de que los ciervos y otras especies que viven en su medio natural,

son potencialmente peligrosos, pero...

en el fondo, todos sabemos lo que es peligroso de verdad.

Lo que pasa es que no lo reconocemos.

En resumen,  las señales de tráfico en nuestro querido pueblo

son como sorpresas por descubrir.

(Si quieres ver "la señal de a noventa", pincha aquí)

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